Capítulo 56: Julio.

   Julio. Al fin había comenzado aquel mes con fama de ser tan caluroso. Estaba muy emocionada porque sabía que iba a ver a James. Cogí un tren que me llevaría a Londres, justo a la estación Victoria. Durante todo el trayecto no pude dejar de pensar en James y en todas las cosas que tenía que contarle. Tan solo esperaba que aceptase el hecho de que tuviese que trasladarme a Nueva York para trabajar en Broadway. Pasaríamos el fin de semana en el campo, en un ambiente tranquilo y modesto. Incluso podría aprovechar para planificar mentalmente mi reunión futura con Anita Loos y Giblert Miller, la guionista y el productor de Gigi.

    El resultado final fue infinitamente mejor de lo que yo esperaba. James pe pidió que me casara con él. Y con lágrimas en los ojos le dije que sí.




Comentarios

Entradas populares de este blog

Capítulo 51: El cine y sus fiestas.

Capítulo 4: Mis padres.

Capítulo 112: Los preparativos.